Como cada año se ha celebrado durante estos días de mayo en IFEMA la feria por excelencia del Broadcast y del Sector Audiovisual de nuestro país, el Bit Audiovisual. Este año la feria celebraba su trigésima edición. Recuerdo haberla visitado siendo un estudiante de audiovisuales, allá por el año 1999.
Por aquellos años se la conocía por el nombre de Salón Broadcast. El pasado 8 de mayo acudí a la inauguración de la misma y me dí un paseo por las instalaciones para poder ver un poquito los últimos avances en nuestro sector y hacer un poco de networking.
Tras echar un vistazo por varios stands, pude observar la cada vez mayor implantación del 4K tanto en cámaras como en sistemas de producción y emisión para TV, deportes, eventos, etc. También pude acudir a unas charlas acerca de la creciente aplicación de la inteligencia artificial en las plataformas de contenidos online y su utilidad.
Mediante la aplicación de algoritmos cada vez más sofisticados y complejos que recopilan cada vez más información sobre nuestros gustos y perfiles de usuario a la hora de consumir contenidos, se puede medir nuestro grado de tolerancia a los mensajes publicitarios, o qué tipo de mensajes publicitarios nos interesan más o asimilamos mejor.
De este modo, y avanzando en la línea de la publicidad contextual y personalizada que ya nos aparece en nuestros perfiles de redes sociales en función de las búsquedas que realizamos, las plataformas intentarán avanzar hacía una publicidad cada vez más dirigida y personalizada a cada individuo, para así poder asegurar a los anunciantes la mayor eficacia y rentabilidad de sus mensajes.
Aparte de este interesante y complejo ámbito de la inteligencia artificial, observe una creciente oferta de servicios de producción audiovisual, edición y broadcast con la filosofía del alojamiento y la gestión de los contenidos desde la nube.
Me sorprendió la propuesta de algunas empresas como watchity que con su filosofía cloud nos ofrece una app que nos permite realización multicámara mediante cualquier tipo de dispositivos digitales que tengan una cámara de vídeo y que puedan emitir en Internet (ya sean cámaras broadcast, como teléfonos móviles, etc).
Además la aplicación te permite compartir al instante y en directo tu programa en redes sociales o en tu página web, reduciendo enormemente el gasto de producción de los live streaming y aumentando las posibilidades de engagement con el consumidor potencial.
Capítulo aparte merecen las cámaras y toda la gama de juguetitos que siempre se presentan en el Bit, que con seguridad despertaron los anhelos y sueños de todos los operadores, realizadores y directores de fotografía que visitaron el certamen.
Por destacar una novedad y una cámara que verdaderamente impresiona me quedaría con la nueva Canon C700 y su sensor RAW de 4,5K (4068×2592). Una verdadera pasada de cámara y el sueño húmedo de los filmakers de medio mundo.
Una muestra de que los sueños nunca fueron baratos…